1.5 /5
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Esta a 1 min de la estación Renfe, un local nuevo, bien decorado. La comida: la carne y pescado estaba bien, el arroz de vieiras y gambas.. de verdad, que no tenía mucho gusto, es que hacer el arroz, no es solo poner los ingredientes, es currarlo bien y a este le faltó bastante. Los vinos: no había ninguna carta, cuando preguntamos, la chica nos ofreció entre blanco y negro, y del blanco solo había 2. Escogimos un Ribeiro estupendo. Luego repetimos la misma botella. El precio no lo sabíamos. Al final, nos costó 27,5 la botella. Creo que es un fallo bastante gordo, de no tener una carta de vinos en España, donde el vino está por todos lados. Aparte, hay que tener unos precios desde más baratos hasta más caros, pero la gente deben tener la oportunidad de escoger. Las cervezas, solo tienen el Moritz, que no está mal, pero, por favor, es un restaurante, si no hay variedad, pierden los clientes y los propietarios.