1 /5
Média de Avaliação
★
Fuimos un domingo, después de visitar Montserrat. La propuesta era un menú de 21,90€ en el cual los primeros eran en formato buffet para después escoger un segundo y un postre. Al pedir las bebidas, nos trajeron cerveza Argus, la marca del Lidl, después al preguntar si tenían otra trajeron un botellín Amstel. El buffet estaba prácticamente vacío, solo pudimos coger algo de ensalada de pasta. Al comentarlo, dijeron que lo estaban reponiendo, pero sólo repusieron unos pinchos de queso y tomate Cherri. Trajeron los segundos bueno uno de los platos era hamburguesa de pollo crujiente (pollo rebozado congelado) que nos sirvieron con un dedo aceitoso clavado en el pan que pedimos que nos cambiaran. Los postres flan, helado de vainilla o chocolate y yogurt, pero nada casero. Al expresarle el descontento la camarera me comentó que saldría la jefa, pero tras esperar más de 10 minutos la camarera prefirió cobrar 2 de los 5 menús. La jefa no quiso salir a dar la cara. No repetiremos.